Pesca Industrial avanza en certificarse con “cero residuos” al Mar

Fuente: El Longino

La flota industrial que opera en Chile desde Arica al Biobío recibió la certificación del Acuerdo de Producción Limpia (APL), configurando una de red de 66 instalaciones que han logrado acreditar que sus naves y operaciones terrestres trabajan con procesos realmente sustentables.

Luego de cuatro años de trabajo conjunto, seis empresas de la pesca industrial de las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta y Biobío alcanzaron la certificación del Acuerdo de Producción Limpia (APL) sobre ‘Manejo sustentable de residuos asimilables a domiciliarios en embarcaciones de pesca industrial’.

La información se la proporcionó a nuestro diario la Sociedad Nacional de Pesca (Sonapesca), entidad que ha logrado acreditar un relevante avance en la disminución de los desechos sólidos generados, especialmente en aquellos que tienen un origen ‘plástico’.

La Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático (ASCC), dependiente de Corfo, entregó recientemente la distinción en Producción Limpia a 66 instalaciones de las empresas Compañía Pesquera Camanchaca, Camanchaca Pesca Sur, Blumar, Orizon, Corpesca y PacificBlu, acreditando que todas ellas que alcanzaron un 100% de cumplimiento en las acciones y metas que implica el APL.

Para que el lector aquilate el alcance de este logro debe tener presente que dichas empresas representan aproximadamente un 65% de toda la pesca industrial que se desarrolla en nuestro país e implican 6.000 mil trabajadores directos y alrededor de 70 embarcaciones de alta mar.


RECICLAJE Y REUTILIZACIÓN

Para la subsecretaría de Pesca y Acuicultura, el gremio se fijó una meta ambiciosa, pero logró un 100% de cumplimiento del cual se beneficia directamente Chile y también los océanos y sus ecosistemas.

‘La reducción de residuos es importante para cuidar nuestros océanos y la biodiversidad y tener este pulmón para los próximos años, por ello agradecemos y felicitamos a todos quienes son parte de este trabajo’, afirmaron.

En este escenario, el Informe de Evaluación de Impacto del APL vino a respaldar la idoneidad de la gestión ambiental y en su él se afirma que las compañías obtuvieron una reducción del 33% en la generación de residuos totales del sector, superando con creces la meta inicial del 10%.

Adicionalmente, lograron también una reducción del 75% de residuos de papel y cartón, seguido por los del tipo ‘tetrapack’ con una baja del 52%.

Asimismo, si bien se mantuvo la forma de retiro y disposición final de los residuos sólidos asimilables a desechos domiciliarios, estos actores de la pesca industrial chilena registraron una rebaja significativa de la cantidad entregada:

De 6.542 kg enviados a vertedero municipal en 2018, bajó a 3.163. kg en 2020, lo que equivale a un 52% menos; en tanto, mientras en 2018 se enviaron 68.048 kg a relleno sanitario, durante el 2020 se alcanzó la cifra de 38.304 kg con una rebaja del 44%.

Consultado sobre las cifras, Osciel Velásquez, presidente de la Sociedad Nacional de Pesca, Sonapesca, expresó a El Longino que ‘hace varios años trazamos una hoja de ruta para desarrollar un trabajo de una nueva pesca en Chile, una más sostenible y responsable, en la que nos hacemos cargo de la reutilización y reciclaje de nuestros residuos’, explica, agregando que a dichas acciones se suman otras tareas como limpieza de playas, de reciclaje de redes de pesca, fomento del consumo de productos del mar sanos y nutritivos e iniciativas de economía circular en la producción pesquera’.


ROL DE LOS TRABAJADORES

Dentro de las actividades del gremio el rol de la capacitación estratégico y en esa área se trabaja junto al Ministerio del Medio Ambiente a fin de crear conciencia sobre temas de protección del ecosistema marino.

Según dan cuentan las entidades del sector, dentro de los cursos que se imparten a los trabajadores ahora se incluyen algunos con temáticas incluso más amplias y especializadas, como son aquellos sobre varamiento de especies marinas protegidas a lo largo de la costa chilena y las especies más afectadas por vertimiento residuos al territorio marítimo.

Finalmente, personal de las embarcaciones asociadas se están capacitando en materias sobre alimentación, de tal manera que puedan combinar diversos tipos de nutrientes y considerar hábitos saludables a la hora de elaborar los menús que se ofrecen a bordo, bajo una doble finalidad: Integrar el tema nutricional junto a protocolos de cocina que también disminuyan la cantidad de residuos orgánicos. Porque verterlos al mar ya no es una opción.